martes, 10 de noviembre de 2009

Mi maldita decisión por Karen Martínez

No sé cómo empezó pero sé cómo va a terminar. Soy Claudia tengo 16 años y fui anoréxica. Todo empezó cuando entro un niño nuevo a la escuela se llamaba Stefan, el era de los estados unidos acababa de llegar, era güero alto su pelo era de color castaño claro sus ojos eran de color azul en fin el era hermoso. En cambio yo era güera tenia ojos verdes y lo peor “gorda”.

Según yo porque mi mamá me decía que yo no era ni gorda ni flaca era normal pero eso no fue suficiente para mí. Cuando me presente con Stefan le dije felizmente- Aló soy Claudia-

El descaradamente me dijo-sí, que se te ofrece hipopótamo-

Yo sabía que el tenia razón yo era un desastre era gorda y tenía que hacer algo de inmediato.

James mi mejor amigo él era alto sus ojos eran de color avellana y su pelo era de color café claro. El fue y le dijo-eres un maldito desgraciado infeliz cómo pudiste decirle eso a Claudia ella solo quiso ser amable- El simplemente no dijo nada e hiso como se estuviera lleno pero en ese momento volteo rápidamente y le quebró la nariz.

Yo no estaba enojada con Stefan de toda formas no era su problema el por más de tratar de defenderme yo no iba a cambiar de opinión yo no iba a dejar de quererlo.

Las maestras suspendieron 3 días a Stefan y 2 a james además de llevarlo al hospital.

Cuando llegue a mi casa ese día me quede pensando en lo que avía pasado, pero mi mama interrumpió diciendo-hija baja, te tengo una sorpresa-

Yo ya sabía cuál era la sorpresa, era mi prima Mónica que venía a visitarnos cada 2 días a la semana ella era lo suficientemente flaca para ser modelo y cada vez que ella tenía oportunidad me lo restregaba en la cara.

-Hola moni como estas-dije con una cara de desinterés –Pues mucho mejor que tu si antier me dejaron salir del hospital ya sabes cosas de modelos-dijo sonriendo

-P p pero porque, que te paso estas bien te enfermaste o algo así-dije preocupada

Ella me miro y me jalo asía mi cuarto –sabes porque soy tan flaca tienes idea de cómo le hago para tener este cuerpo de envidia – dijo riendo y con una cara así como diciendo “esta niña no entiende nada”-No se supongo que con ejercicio y una dieta balanceada-dije en tono burlesco.

-No para nada, jajá mira al principio no comía nada pero después de un rato ya no aguantaba el hambre así que lo que comía lo vomitaba, para ya no sentir culpa-dijo felizmente. – Y eso funciona es así de fácil-dije emocionada –crees que si no funcionara lo segura asiendo, claro que funciona por eso tengo un cuerpo de envidia-dijo en tono de orgullo.-bajen a cenar –grito mi mamá, ella bajo y le dijo que ella ya avía cenado en la casa de una amiga, yo le grite a mi mamá-Mamá me duele mucho la cabeza mejor me voy a dormir-no puede ser le mentí a mi mamá yo nunca le avía mentido en fin me puse mi piyama y me fui a dormir. Ya avían pasado 3 semanas de mentiras y engaños no lo soportaba mas mi mamá me seguía creyendo cada mentira que yo le decía pero tenía que seguir así iba muy bien apenas avía perdido 9 kilos era muy poco para mi tenía que pesar menos.

Mi mamá se empezaba a preocupar ella cada mañana me decía-Clau no crees que estas enferma estas adelgazando mucho y muy rápido y eso que no estás asiendo ningún ejercicio ¿verdad?-me daba tanta tristeza seguir mintiéndole pero no avía logrado mi cometido pero yo cada mañana le decía lo mismo

- No mamá no tengo nada estoy bien no te preocupes por mi seguramente son cambios hormonales-

Lo único bueno es que Stefan cada vez empezaba a hablarme mas y mas, pero lo malo es que no savia si asía lo correcto en hablar con el por qué yo sabía lo de James avía hecho por mí pero yo no le avía dicho que le dijera nada, en fin no se puede complacer a todo el mundo.

Mientras estaba en mis pensamientos Stefan me dijo-oye Clau quieres ir con mis amigos al cien en la noche-

Que le voy a decir no quiero sonar desesperada pero en verdad quiero ir –Bueno supongo que sí –deje desinteresada pero a la vez muy feliz wau iba a salir con Stefan eso era lo mejor que me avía pasado en la semana. Cuando salimos de clases lo primero que hice fue agarrar mi celular y marcarle a Mónica –Aló? –Dije al contestar –hola como estas-dijo moni –oye me podrías prestar un poco de tu ropa pliss la necesito voy a ir al cine con unos amigos-dije esperando que ella me dijera que si-si, está bien pero no creo que nada de mi ropa te quede-dijo entre risas –créeme me va a quedar- dije segura de mi misma.

Al llegar a casa de Mónica su mamá me abrió la puerta y me dijo que subiera al cuarto de Mónica además de decirme que me veía muy bien, cuando entre al cuarto de ella no me voltio a ver solo me dijo que ella no creía que me pudiera quedar su ropa pero cuando volteo a verme ella se quedo sorprendida –pero cómo es posible, no me digas que estas asiendo lo que te dije vez que si funciona te lo dije y tu no me querías creer- dijo en tono de satisfacción.

Me probé cada cosa que ella tenía en su armario y absolutamente todo me quedaba estaba orgullosa de mi misma.

Cuando termine de probarme cosa ella y yo empezamos a hablar y cuando estábamos ablando yo le comente que no me podía concentrar en las clases y se me estaba cayendo mucho el pelo, le pregunte si eso era por no comer, pero ella lo negó todo y dijo que a ella no le pasaba eso.

Cuando llegamos al cine vimos una película bastante mala debo decir pero lo peor de la noche fue cuando Stefan me dijo –Clau eres muy bonita pero entes te veías bien pero ahora pareces esqueleto y yo no quiero una novia así –dijo mientras se alejaba. No lo pida creer yo avía hecho esto por el yo quería que él me quisiera.

Cuando llegue a mi casa seguía triste estaba subiendo las escaleras cuando oí a mi mamá llorando me acerque cuidadosamente a su recamara mi mamá le dacia a mi tía la mamá de Mónica –pero entonces si la pudieron sacar de el paro cardiaco tu sabes que se va a mejorar-decía mi mamá entre lagrimas.

A la mañana siguiente fuimos al hospital en donde internaron a Mónica mi mamá se llevo a mi tía a dar un paseo para que se despejara su mente, yo estaba sola en su cuarto cuando de pronto llego James le di un fuerte abrazo y le conté lo que me pasaba y él me tomo de la cara y me dijo-te voy a dar algo que calmara tu dolor- después de besarme me dijo que ese beso duraría para siempre, ya avía encontrado a mi príncipe azul pero siempre estuvo hay ayudándome.

Después de que llego mi mamá le conté todo y ella me dijo que me iba a conseguir ayuda.

Llevo dos meses de rehabilitación

3 comentarios:

  1. Que bonito karen XD
    esta bonito,
    le cambiaste cosas eeee, y sin mi autorizacion ee,
    es puro paro (siga)
    bueno tu cuento esta padre porque te platica coo se puede sentir una persona con trastorno alimenticio,
    te demuestyra todas las estupideces que hacen las niñas ahora en estos tiempos para gustarles a los niños o a alguen,
    te dice que lo que cuenta es tu belleza interna y no tu "look", como eres por fuera
    "lo que vale es lo de adentro"
    (no, nada de intestinos ni nada XD"
    PT: GENIAAL :D

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  2. MAGICAMENTE aparece este comentario diciendo:
    ESTE EWS MI SSEGUNDO COMENTARIO baee

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  3. mm..
    EL primer cuento que leí fue el de 'La nena' de Ricardo Mojica. Se me hizo bueno porque de verdad te hace pensar e imaginar las condiciones en las que está viviendo la niña. Además, es un cuento realista, de verdad pasan esas estupideces de que hasta tu propia familia puede lastimarte. Sólo que aveces explicaba una cosa y de repente, se pasaba a otra y no se entendía muy bien. Pero en general, se me hizo un buen cuento.
    El segundo que leí, fue el de Andrea Larios 'Cada final lleva a un buen comienzo' , también se me hizo un buen cuento solo que un poco cliche. Me gustó el tema que escogió Andrea y su título porque de verdad un final te lleva a un buen comienzo (aveces), solo que el final de los lockers no me gustó porque odio que me dejen en suspenso.
    Alexia :)

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